jueves, 5 de agosto de 2021

El auge de las pardillas.

 La cerceta pardilla (Marmoranetta angustirostris), pequeño y amenazado pato del mediterráneo, suma efectivos en la Comunidad Valenciana, en gran parte gracias a programas de cría en cautividad y sueltas en espacios naturales, concretamente en los humedales de l'Albufera (Racó de l'Olla) y la Marjal dels Moros. Dos lugares que, si me seguís asiduamente, sabréis que visito bastante en mis salidas; esto claramente significa que me estoy encontrando bastante con la especie. Es más, ayer mismo visitando el Racó este ejemplar se fue acercando hasta dedicarme un auténtico pase de modelos. Lástima que las fotos más cercanas hayan salido algo desenfocadas, pero creo que tengo bastantes de buena calidad.

Cerceta pardilla.


Al proceder de suelta todas están anilladas, en este caso a partir de 2019. Procedentes del programa de cría del centro de recuperación de La Granja.

En l'Albufera hay muchas más aves, tanto en la propia reserva ya citada como en sus alrededores, muy entretenidos estos días por el paso migratorio de limícolas. En el propio Racó chorlitejos chico (Charadrius dubius) y grande (Charadrius hiaticula), 2 combatientes (Philomachus pugnax) y 1 correlimos zarapitín (Calidris ferruginea), y cerca de allí 3 ostreros (Haematopus ostealagus), un grupo formado por correlimos zarapitín, común (Calidris alpina) y menudo (Calidris minuta), vuelvepiedras (Arenaria interpres), archibebe claro (Tringa nebularia) y 2 zarapitos trinadores (Nummenus phaeopus), aparte de flamencos (Phoenicopterus roseus), gaviota picofina (Larus genei) y de Adouin (Larus audonii)... Como comprenderéis, ver todo esto en 3 horas de observación no tiene precio, y lo disfruté comom pocas veces.

Los 3 ostreros. He decidido empezar por las fotos en que los ejemplares estaban lejos y por ello son más malillas, luego la cosa cambia.

Chorlitejo grande.

Correlimos zarapitín.

Combatiente.

Otra cutre-foto de abejarucos (Merops apiaster) y tórtola europea (Streptopelia turtur).

Chorlitejo chico.

Correlimos menudo. Se van acercando al objetivo y...

Los más "chupacámaras": archibebe claro.

Vuelvepiedras.

Chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinum). Esta madre tiene 3 pollos pequeños y algunos se asustan hasta de su sombra...


Las cigüeñuelas (Himantopus himantopus), sin embargo, no tienen ese problema. Estos pollos crecidos y sus padres no dudaron en atacar conjuntamente a una pareja de intrusos.

Detalle de un adulto.

Gaviota picofina.

Gaviotas de Adouin. Este joven portaba anilla y estoy esperando a recibir el historial.


Flamenco.

La población de pardillas en la Marjal dels Moros es aún mayor, viendo en dos mañanas distintas 6 individuos adultos (23-07) y 2 adultos y un pollo crecido (28-07). Aquí encontramos carteles, colocados por un compañero de afición al que conocí recientemente en el viaje a Andorra, donde se pide que, si ves ejemplares, envíes los datos de la observación al centro de recuperación de La Granja, responsable de las reintroducciones y con programa de cría de la Generalitat. Enviando dichos datos se contribuye al proyecto, con datos de primera mano muy importantes a la hora de conocer la evolución de dichas poblaciones.

Los encuentros aquí suelen ser mucho más lejanos a los observatorios.

Una vez más, las cercetas no fueron las únicas. Lo que más me gustó aquí fue un martinete (Nycticorax nycticorax) adulto en busca de cangrejos americanos que me sobrevoló mirándome con sus intensos ojos rojos, junto a limícolas como los zarapitos trinadores, correlimos zarapitines y menudos, archibebe claro y, como novedad un andarríos grande (Tringa ochurops), esta vez con especies difíciles de ver en Albufera como el somormujo lavanco (Podiceps cristatus) o el avetorillo (Ixobrychus minutus).

Martinete.

Zarapito trinador.

Andarríos grande.

Canastera (Glareola pranticola).

Garza real (Ardea cinerea).

Garceta grande (Ardea alba).

Porrón común (Aythya ferina).

Somormujo lavanco.

Hembra de avetorillo haciéndose la difícil.

La conclusión es que, igual que pasó en su día con el calamón y la malvasía cabeciblanca, la cerceta pardilla expande sus poblaciones gracias a los programas de cría, a los que quizá debería dedicarse más tiempo y recursos ya que, a la vista de los resultados, funcionan. Quién sabe cuál será la próxima especie en expansión... ya anticipo que se habla de la focha moruna (Fulica cristata).

Aquí acaba la entrada de hoy; estoy disfrutando bastante estos días con las aves, a pesar del calor se están dejando querer bastante. Veremos como continúa la cosa, se acerca el paso migratorio y otro viaje bichero que voy a dejar que sea una sorpresa.

En fin, un saludo y...

¡Nos vemos en las tierras silvestres!

Correo de La Granja por si alguien se pasa por aquí y ve alguna. Enviar fecha, nº de ejemplares y anilla si se ve (anticipo que aquí es difícil): centre_granja@gva.es

domingo, 1 de agosto de 2021

Flores y paisajes del pirineo andorrano (Parte 2).

 Final de esta aventura recorriendo prácticamente todo un país, de los pequeños, pero ya es decir bastante. El resto de días, a pesar de la considerable bajada de especies botánicas (casi todas repetidas, aunque es algo normal estando tantos días), sí que pude bichear bastante más, incluso pajarear, lo que supuso muy buenas incorporaciones faunísticas. Podría decirse que, en cuanto a diversidad, esta es la mejor parte del viaje, algo que, después de un inicio espectacular y dos excursiones de las que esperaba más, agradecí muchísimo.

- Mirador del Roc del Quer:

Nos habíamos quedado en la tarde del tercer día completo en el país, cuando fuimos a este espectacular mirador. Se encuentra colgado sobre unos riscos, en un entorno de prados alpinos y bosques de pino negro, ofreciendo espectaculares vistas de los alrededores, así como la sinuosa carretera que lleva al mirador. Personalmente me habría quedado más tiempo aquí, incluso visitando algún paraje cercano pues la zona se veía brutal, pero ese día justo querían volver pronto para ver el fútbol; es lo malo de los viajes organizados, que cada uno quiere una cosa, pero hay que adaptarse al grupo y, claro, no te puedes quedar por ahí tú sólo.

Subiendo...




Vistas desde el mirador.



Áster alpino (Aster alpinus).

Los halcones peregrinos (Falco peregrinus) nidifican en la zona, como me demostró un juvenil llamando insistentemente desde un roquedo. Aunque no pude ver si llegaban más, sin duda criarán aquí o cerca.

Halcón peregrino.

- Parque Natural de Sorteny:

Primer parque natural que visitamos en el viaje (también el último). Un día despejado y espectacular, en un paraje lleno de flores, mariposas... y con un pequeño jardín botánico de montaña muy interesante, todo esto después de probar más exposiciones acuáticas en un bonito río. En cuanto a las mariposas destacaban las blancas del majuelo (Aporia crataegi) y la gran apolo (Parnassius apollo) justo al lado del camino.


Sorteny.



Centaurea montana.

Flores en el camino.

Gymnadenia conopsea.

Azucena del pirineo (Lillium pyrenaicum).

Niña turquesa? (Plebicula dorylas?)

Blanca del majuelo.

Apolo.


Desde aquí fuimos caminando, primero por bosques y después por turberas y prados alpinos, hasta un bonito lago donde comimos; la ruta hasta allí ya mereció la pena, con el único avistamiento de marmota (Marmota marmota) del viaje, muy lejano pero habría sido mucho peor irse por primera vez del Pirineo sin ver ninguna.

Subiendo por el bosque.


El lago está justo debajo de las montañas del fondo.

En el lago, aparte del bonito paisaje, verderón serrano (Carduelis citrinella), buitres leonados (Gyps fulvus) y un quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), aparte de otras flores de montaña que, aunque ya las había visto, aquí estaban preciosas.

Impresionante... estar aquí es como un sueño.


Dactylorhiza maculata.

Siempreviva (Sempervivum montanum).

Quebrantahuesos.

Verderón serrano.

La bajada también fue rápida, pero, como la actividad del día era un balneario y yo me había apuntado para recargar pilas y probar un poco el tema, esa vez no me importó tanto el ritmo rápido, a pesar del tiempo récord en que hicimos la ruta. Dejamos por el momento las rutas y vemos el balneario por fuera, un edificio bastante espectacular:

Caldea.

- Estanys de Pessons:

Una de las rutas que más esperaba, pues me gustan los lagos de montaña y los paisajes que se forman alrededor y en esta ruta habían bastantes. Por cierto, no sé si lo he comentado pero aquí y en Cataluña los lagos se denominan "Estanys", al contrario que en el pirineo oscense y navarro que son conocidos como "Ibones". 



La primera parte de la ruta era un duro sendero entre bosques de pino negro, donde volví a ver al verderón serrano y vi por primera vez en mi vida al reyezuelo sencillo (Regulus regulus), el ave más pequeña de Europa, con un avistamiento bastante bueno y la oportunidad de compartir con mis compañeros de excursión (algunos) esta pequeña ave. Empezaba bien el día.

Reyezuelo sencillo.

En los lagos no habían muchas aves pero compensaba la belleza del lugar, la amabilidad de sus "habitantes" y una vez más la flora. Los lagos creo recordar que son 10, pero vimos 8; aquí voy a poner todos los fotografiados pero puede que haya más, puede que alguno estuviese seco.

Primer lago.

Segundo.

Tercero.

Cuarto.

Quinto.

Ranas bermejas (Rana temporaria).


Sexto.

Séptimo y octavo que vimos.

Erebia triaria.

Nos encontramos con algunas vacas y sus terneros.


Panorámica del primer lago a mediodía.

De nuevo una bajada rápida, esta vez para que los que estaban apuntados fuesen a la tirolina, actividad que me da mucho respeto y, la verdad, prefería un cómodo paseo hasta el río y descansar un poco el resto de la tarde.

Río Valira.

Buscaba tranquilidad, pero la cosa daría un giro hacia el terreno de las emociones fuertes. Saltando el río de roca en roca hasta la orilla del sendero que lleva al pueblo, me encontré a este juvenil de víbora áspid (Aspis aspis) que se puso en alerta al oírme.

Víbora áspid.

Por supuesto entiendo que son animales salvajes pero, si no son molestados o se sienten amenazados, no atacarán; el problema fue encontrar el camino correcto para salir del río, evitar molestar al bicho y la posible mordedura y, muy importante, sacar una foto del bicho desde una distancia segura porque me parecen animales fascinantes... mucho ojo con mis prioridades, jajajajaj.

- Estany de les salamandres:

Último día de ruta. Antes de empezar el relato una aclaración: en el susodicho lago no hay salamandras, sino tritones. El lago se llama así y así llaman aquí a sus habitantes anfibios, y así nos lo transmitió el guía; no es culpa suya: es guía de montaña, y el mero hecho de que, al interesarle la botánica, se prepare alguna que otra explicación sobre flora y fauna sin estar obligado a ello ya me parece algo digno de admiración.

Aquel día, a pesar de estar de vacaciones, ya había mucha gente hablando de las nuevas restricciones que nos esperaban en Valencia; al final, al menos a mi, no me han afectado para nada porque a la 1 suelo estar durmiendo y no suelo reunirme con más de 10 personas a la vez, y, aún mejor, han conseguido que baje la incidencia. Y ya el inicio de la ruta hacía pensar que sería un día muy bueno:

Genciana (Gentiana lutea).


Majestuoso pino negro.

Llegamos al lago ascendiendo por empinadas laderas donde se movían de nuevo bisbita alpino y collalba gris como el primer día, y esta vez se dejaron ver mucho mejor, así como los tritones: había bastantes y se dejaban ver bien.

Collalba gris (Oenanthe oenanthe).

Bisbita alpino (Anthus spinoletta).

Tritones palmeados (Lissotriton helveticus).

Bajar desde el lago al hotel fue bastante duro debido al calor, pero con las últimas observaciones florales del viaje y entre risas todo se lleva mucho mejor. Mención especial los prados salpicados de lirios...


Lirios (Iris latifolia).


Rosal alpino (Rosa pendulina).

Por la tarde visitamos Andorra la Vella, y, mientras los demás visitaban el museo Tyssen, yo opté por callejear y ver un poco aquello pues me resulta más agradable que estar 1 hora de pie viendo cuadros que, en la mayoría de casos no disfruto al no comprenderlos.

San Pedro Mártir.


Puente románico de Escaldes-Engordany (S.XVIII).

Algunas cosas más exóticas que por Valencia es difícil encontrar...

Después de esto ya volví a Valencia, satisfecho por una semana fantástica y, ante todo, feliz de haberme saltado una buena ola de calor y aterrizar en (por aquel entonces) un ambiente inusualmente fresco para estar en pleno verano. Os dejo con unas últimas fotos: escribanos cerillos (Emberiza citrinella) vistos temprano en el camino al río. Además, este año volveré al Pirineo; ya contaré.

Escribano cerillo.

En fin, un saludo y...

¡Nos vemos en las tierras silvestres!