martes, 26 de enero de 2021

Las sorpresas que nos deja "Filomena"

 Estos días, meteorológicamente hablando (que lo demás ya sabemos lo que hay), han sido bastante complicados: nevadas, lluvias, viento muy fuerte... es lo que nos ha traído la borrasca "Filomena". Además de todo esto, llega un gran momento después del temporal: las especies de aves que desplaza. Ya sean rarezas o especies que no solemos ver, es momento de buscar las que nos visitan buscando refugio, alimento... Este año la cosa en principio parecía algo sosa, hasta que saltó la sorpresa: ¡¡¡Una alondra ricotí (Chersphilus duponti) en la Marjal dels Moros!!! Lo cierto es que, estando el coche en el taller, no pude acercarme hasta el sábado pasado, pero la espera mereció la pena. En resumen: más de media hora observando las idas y venidas del críptico aláudido, un auténtico fantasma dentro del mundo de las aves. Veréis que, para que se pueda apreciar mejor, he rodeado al ave en algunas fotografías.


Ya de primeras, el discreto pájaro dejó claro que no iba a dejar de moverse y ocultarse para que lo viera mejor, así que fue cosa de ir acompañándole, a cierta distancia, durante sus movimientos, tal y como hacían otros aficionados.


Al final se acercó bastante junto a un pequeño grupo de verderones (Carduelis chloris).



Lo cierto es que no es la primera vez que esta especie aparece en la Comunidad Valenciana, aunque sus citas aquí son escasas. Cría en amplias zonas esteparias del Sistema Ibérico, depresión del Ebro, La Mancha y el Sureste (Murcia-Andalucía), donde se encuentra en regresión por los cambios en métodos y especies de cultivo. Pese a ello, se están haciendo esfuerzos de conservación, entre ellos esta curiosa iniciativa: https://www.burgosconecta.es/provincia/ribera/vino-burgales-busca-20191113152048-nt.html

De momento sigue por la zona, por lo que he estado viendo en eBird, así que si vivís cerca y la queréis ver os animo a que aprovechéis esta oportunidad; si no, disfrutadla en las anteriores imágenes y en las que estos días se están subiendo a eBird.

Porrones (Aythya ferina), cucharas (Anas clypeata).

Ánade friso (Anas strepera).

Malvasía cabeciblanca (Oxyura leucocephala).

Evidentemente la alondra fue una de las muchas observaciones de las que disfruté, empezando con una generosa cantidad de anátidas de arriba, un bando de unas 30 avefrías (Vanellus vanellus)...


Avefrías.

Monte Picaio.

Para terminar un siempre agradecido encuentro con la gaviota de Adouin (Larus audonii), aunque esta vez empañado por la escasa luz y dos impresentables que la espantaron para hacerse unos "selfies" junto al mar. Decir también que varios perros sueltos y sin ningún control se colaron en la zona de reserva y levantaron todas las anátidas... mucho nos queda por aprender, más ahora con bares y demás cerrados y con pocas opciones más que pasear por el campo.





La siguiente ave no es rara en sí, pero sí que lo es un poco dónde se encontraba. Y es que no todos los días ves un carbonero garrapinos (Parus ater) a apenas 2 kilómetros de la costa, en un punto que visitas casi a diario. Primera vez que veo esta especie en mi pueblo.


Carbonero garrapinos (Parus ater).

Otras observaciones por Alboraya y alrededores han sido los enormes bandos de paloma torcaz (Columba palumbus) de centenares de individuos, que al principio tomé por grandes nubes de estorninos. Pude ver un bando bien de cerca y es increíble las cantidades que llegan a haber.




Las gaviotas reidoras (Larus ridibundus) no son ninguna novedad, habiendo cientos invernando, pero siempre puedes sacar alguna foto chula.


Petirrojo europeo (Erithacus rubecula).

Verdecillo (Serinus serinus).


Jligueros europeos (Carduelis carduelis).


Estos días de claroscuros también están muy bien para alguna composición chula, sobre todo con algunas casa de huerta (dejando de lado el deplorable estado de algunas).


Como siempre en los temporales, gran cantidad de gaviotas cabecinegras (Larus melanocephalus) y reidoras.





Esta mañana ha sido la primera con sol al completo, y como no podía ser de otra manera la he aprovechado con estos y muchos más bichos:


Colirrojo tizón (Phoenicurus ochuros).

Tórtola turca (Streptopelia decaoto).

Y la familia al completo de calamones (Porphyrio porphyrio) con sus pequeños.


La última sorpresa me la lleve en el pequeño pueblo de Quatretondeta (Alicante), cuando después de una buena caminata encontré esta hembra de lúgano (Carduelis spinus) tras dos años sin ver ni uno, y un zorzal común (Turdus philomelos) oculto entre los olivos.



Para terminar, me vais a permitir enseñaros la bonita ruta de "Els Frares", unas rocas en forma de aguja esculpidos por el modelado kárstico. Decir que, sin duda, la sierra de Serrella (donde se encuentra ubicado el paraje), con gran cantidad de rutas de senderismo y paisajes brutales, se queda en el tintero para otras excursiones.

Mallada del Llop (1361 msnm).

Montcabrer (1390 msnm) visto desde la ruta.

Els Frares.

Rubia peregrina congelada.


Ni las rocas se libran de "Filomena".





No, no he viajado a Narnia.



Espectaculares formaciones.






Y hasta aquí los regalos de "Filomena": 3 especies de aves que no suelo ver, una de ellas novedad que, dado su carácter desconfiado, no imaginé que vería tan fácilmente; paisajes brutales, y un poco de frío que nunca está de más, jejeje. A ver que otras cosas puedo sacar por el blog, de momento se avecinan días bastante atareados en el trabajo.

En fin, un saludo y...

¡Nos vemos en las tierras silvestres!

viernes, 22 de enero de 2021

Retrospectiva del 2020

Puede parecer que llego tarde, pero entre revisar las fotos que hiciera en los hides de Mariola y las fructíferas salidas de principio de año, pues aún no me había puesto por aquí a contar un poco como ha sido este año tan raro... y digo por aquí, porque este 2020, entre otras cosas, me he animado a resumir las observaciones más interesantes de aves en un pequeño "anuario" ornitológico; eso sí, solo de la provincia de Valencia, de lo contrario habría sido un caos... en fin, aquí está el anuario en cuestión; a pesar de las complicaciones de este año, al final creo que me ha salido bastante completo:

 Anuario ornitológico de Valencia - 2020

Muchas observaciones de aves, mamíferos, invertebrados, flora... a pesar del confinamiento,  de Enero a Marzo y, sobre todo, a partir de Mayo; quizá no tantos viajes y escapadas por España, pero creo que con 4 ya voy bien servido. Además, he podido conocer zonas que llevaba tiempo queriendo ir y, por si fuera poco, siete especies nuevas:

- Aves: Gorrión chillón (Petronia petronia), camachuelo común (Pyrrhula pyrrhula), pico mediano (Dendrocopus medius), gaviota de Delaware (Larus delawerensis), zorzal alirrojo (Turdus iliacus).

Camachuelo común.

Gorrión chillón.

Pico mediano.

Zorzal alirrojo.
Gaviota de Delaware.

- Mamíferos: Gato montés (Felis sylvestris), lobo ibérico (Canis lupus subsp. signatus).

Gatos monteses.


Lobo ibérico. Por lo que observamos una hembra.

Evidentemente con los dos nuevos mamíferos, a pesar de haber obtenido solo fotos testimoniales, estoy feliz como un enano, pero con las aves tampoco me quedo corto. Por no hablas de la cantidad (y calidad) de los paisajes y zonas visitadas. Una selección de imágenes de todo ello es para mi la mejor forma de decir adiós a este año tan raro.

Sierra de Aitana y buitre leonado.

Sierra de Guadarrama.

Valsaín (Guadarrama).

Valle de Benasque (Esta y la del quebrantahuesos).

No pongo esta vez nombre científico por dinamizar un poco.

Valle de Otal.

Torla.

Azucena silvestre.

Picos de Europa.

Montaña de Riaño.

Blanquiverdosa.

Avetorillo hembra.

Tórtola turca.

Golondrinas comunes.

Águila perdicera.

Correlimos gordo.

Malvasía cabeciblanca. Macho.

Escribano palustre.

Marjal dels Moros (Como muchas de esta entrada).

Alcatraz atlántico.


Flamencos comunes.

Alcaudón real.

Ardilla roja.

Águila real.

Aparte de lo que se haya podido hacer o no, este año ha sido bastante raro también en lo personal. Yo por mi parte no tengo que lamentar ningún sobresalto, pero son muchos los que se han ido inesperadamente, siendo un mazazo muy duro para la sociedad. Así como también han influido bastante las restricciones: un mes y medio sin poder asomarnos a la esquina, pasear o ir a por el pan todo el rato con la mascarilla, no poder ni tocar a tus familiares/seres queridos... Una frase que creo que resume bastante bien este año, es que lo importante al final es pasarlo; puede parecer algo frívolo, pero al fin y al cabo tenemos que seguir adelante, no hay otra...

Algunas imágenes de mi confinamiento.



Bueno, y también decir que lo importante de esta entrada es quedarse con lo bueno; en estos tiempos cada uno tiene su opinión, y probablemente haya alguien en desacuerdo con algo de lo expuesto el el párrafo anterior. Es una de las cosas que tiene escribir un blog (o cualquier otra cosa), que es muy posible que algunas personas no compartan tu opinión, incluso que les moleste. Al final estas cosas no pueden evitarse.

En fin, pues esta es mi opinión sobre este año que dejamos. Como siempre ha habido de todo: alegría, pena, incertidumbre (quizá más de la cuenta de estas dos últimas), ilusión... Creo que cada año tiene sus momentos, buenos y malos... a ver si poco a poco los primeros aumentan en número.

En fin, un saludo y...

¡Nos vemos en las tierras silvestres!